13 Jan 2014

Sentir entre líneas.

¿Alguna vez has sentido que tienes tanto que decir, tanto dentro de ti, que no sabes ni por dónde empezar?
¿Has tenido tu boca sellada cuando tu interior hablaba a voces?
En esos momentos, lo único que sale de nuestros labios es un leve suspiro.
Y otro.
Y otro...
Pero por muchos suspiros que salgan de las puertas de nuestra alma, todo lo que tenemos que soltar se queda atascado en la garganta.
Como un nudo que nos ata a la incoherencia; y cada día que pasa se enreda -y nos enreda- más y más, sin ser apenas ser conscientes de ello.
Sólo se me ocurre respirar hondo y tragar saliva, esperando que ese nudo de palabras  pesadas como el plomo, nos arrastre al fondo lo más pronto posible.
Y con una tétrica sonrisa, nos ahogamos.

No comments:

Post a Comment