La culpa es nuestra. Por creernos aves y hacernos alas. Alas hechas de ilusión. De abrazos a medias. De mirarte cuando tú no me miras. De besos sin ganas. De noches frías.
Por eso siempre que alzamos el vuelo, caemos; porque nuestras alas están hechas de un material defectuoso y, sobretodo, porque somos humanos. No volamos en el sentido literal de la palabra.
Creo que muy poca gente entiende eso.
Y así estáis todos; rotos, por no utilizar el sentido común.
Dicho esto, puede que yo también haya cometido la estupidez de fabricarme alas. Defectuosas, como todas.
Pero te aseguro que no las necesito. Con o sin ellas, prometo -aunque odie prometer- que volaré hasta ti.
Sé que lo conseguiré. Y la seguridad formará mis nuevas alas.
Por eso siempre que alzamos el vuelo, caemos; porque nuestras alas están hechas de un material defectuoso y, sobretodo, porque somos humanos. No volamos en el sentido literal de la palabra.
Creo que muy poca gente entiende eso.
Y así estáis todos; rotos, por no utilizar el sentido común.
Dicho esto, puede que yo también haya cometido la estupidez de fabricarme alas. Defectuosas, como todas.
Pero te aseguro que no las necesito. Con o sin ellas, prometo -aunque odie prometer- que volaré hasta ti.
Sé que lo conseguiré. Y la seguridad formará mis nuevas alas.
No comments:
Post a Comment